Carlos Compagnucci

“Los grandes acontecimientos se hacen con las tres patas: equipo, dirigentes y la hinchada”.

Carlos Compagnucci, volante, que llego a Morón a préstamo de Vélez, es uno de los jugadores que consiguiera aquel histórico y último título, con el Deportivo Morón en 1990.

Entre ese año y 1991, disputo con la blanquiroja un total de 67 partidos y 8 goles convertidos, luego volvería a Vélez Sarfield, en donde conseguiría 4 torneos locales y 5 copas internacionales (entre ellas la Libertadores y la copa Intercontinental 1994, ganándole nada más ni nada menos que al poderoso Milán de Italia). 

Su retiro fue en 1999 justamente en el conjunto de Liniers, y paso a ser Director Técnico. Su debut, como entrenador, fue en 2001 tras la renuncia de Oscar "el maestro" Tabarez, asumiendo la dirección técnica de forma interina. Su raid como DT incluye algunos clubes de Sudamérica hasta que recalo en Estudiantes de La Plata, donde actualmente se encuentra trabajando con Mauricio Pellegrino como ayudante de campo..

Como es ya de costumbre en esta sección nos encontramos con “Compa”, y le hicimos una nota para que las nuevas generaciones de hinchas del gallo, puedan conocer más, acerca de un jugador que hizo historia con la camiseta de Morón. 

¿Cómo fueron tus inicios en el mundo del futbol?

Me inicie en Matienzo de Monte Buey, mi pueblo, y ahí realice divisiones menores hasta que debute en primera a los 15 años; jugué hasta los 17 luego me vine a probar a Vélez Sarfield donde jugué en inferiores hasta que debute en primera en el 1989.

¿De qué manera se dio tu llegada a Morón?

"El gato" Daniele fue a ver u partido de Reserva a Vélez, y junto con otros futbolistas quedamos

preseleccionados en una lista, luego los demás jugadores no quisieron ir, yo viendo las pocas posibilidades que de jugar ese año, decidí partir a préstamo.

¿Qué nos podes contar de aquel histórico campeonato?
El inicio del torneo fue duro, diría que terminando la primera ronda el equipo empezó a funcionar, había muchas expectativas, teníamos presiones y eso se notaba en el funcionamiento. Pero en el inicio del segundo semestre el grupo se fortaleció y sentíamos que estábamos para campeón.

¿Cómo recordas el partido vs Defensores de Belgrano en el Francisco Urbano?

La noche previa fue complicada para descansar, yo estaba con muchos nervios, sabía que todo el año se jugaba en 90 minutos, pero cuando se inició el partido, (como pasa siempre) uno ya se mete solo en lo que debe hacer, el grupo respondía a lo que el “gato” pedía, así que fue más fácil de lo esperado. El marco del partido era perfecto, la cancha llena, y la gente alentando.

¿Qué valor tiene ese logro en tu exitosa carrera?
Salir campeón con Morón, me permitió ser reconocido, fui participe de un campeonato en un club espectacular, la gente me hacía llegar su afecto, todos los días, yo viajaba en el tren, vivía en la pensión de Vélez, y cuando llegaba a la estación, era muy lindo recibir el afecto del hincha. El logro no me permitió volver a Vélez, pero si seguir un año más en Morón, club que me termino de formar como futbolista, y eso gracias al “gato” Daniele, al presidente Machado Ramos y Hugo Toschi, que pidieron por mi vuelta.

¿Alguna anécdota de aquellos años que nos quieras contar?

El grupo de ese equipo era bravo, mucha personalidad dentro y fuera de la cancha. Pasaron muchas cosas lindas pero me quedo con el festejo final, con toda la gente.

¿Seguís a Morón en la actualidad?
Miro algunos partidos si los pasan en televisión, leo los diarios, comentamos algo con Román Martínez y Orihuela, que están en Estudiantes, no más que eso. Pero me gustaría ir más seguido a ver partidos y conocer el nuevo estadio, una cuenta pendiente.

Y para cerrar. ¿Algún mensaje para la gente del gallo?
Sé que como club se merecen lo mejor, por historia y por gente. Hago fuerzas para que puedan campeonar, solo sé que los grandes acontecimientos se hacen con las tres patas, equipo, dirigentes y la hinchada, es un buen momento para dar el salto, este torneo lo permite. Mucha suerte al gallo.